Las bombas se activan cuando el nivel del reservorio alcanza determinada altura. Las bombas succionan el agua para ser trasladada por cañerías que atraviesan el terraplén y corre por cuencos de descarga hacia la zona de bañados del río. El Municipio cuenta con puntos de bombeo móvil, que son lugares establecidos donde se instalan equipos móviles para extraer el agua cuando se dan lluvias de mediana o alta intensidad, y se requiere un refuerzo. Más de 150 bombas, entre fijas y móviles, se encuentran distribuidas en más de 50 puntos de bombeo de la ciudad. Se utilizan actualmente para evacuar los excedentes pluviales. Desde los reservorios, el agua es evacuada al río a través de las estaciones de bombeo, que son plantas equipadas para extraer el agua de la ciudad hacia fuera de los terraplenes, mediante electrobombas o motobombas; y que cuentan también con compuertas de descarga por gravedad que son abiertas cuando los ríos están bajos y cerradas cuando crecen.